La estrategia conjunta entre México y Estados Unidos para frenar el flujo de fentanilo, armas y migración irregular fue destacada este miércoles 6 de agosto por el embajador estadounidense Ronald Johnson.
A través de su cuenta en X, el diplomático resaltó los avances logrados gracias a la coordinación entre ambos gobiernos, encabezados por la presidenta Claudia Sheinbaum y el expresidente Donald Trump, aunque el contexto real del acuerdo despierta dudas y controversias.
Coordinación binacional en seguridad con rostro político
Johnson subrayó que la colaboración entre ambos países ha permitido reducir el tráfico de fentanilo hacia el norte, el traslado ilegal de armas hacia México y la migración no regulada en la frontera común.
Enfatizó que “cada arma incautada significa una familia más segura” y “cada gramo de fentanilo detenido puede salvar una vida”, atribuyendo los resultados a una estrategia conjunta que prioriza la seguridad ciudadana.
Este mensaje cobra relevancia justo después de que Sheinbaum asegurara que los cárteles mexicanos no entorpecen el acuerdo bilateral, hecho que contradice numerosas denuncias y reportes de la realidad en terreno.
La mandataria también detalló que el acuerdo se fundamenta en cuatro principios: respeto a la soberanía, respeto a la territorialidad, confianza mutua y colaboración permanente.
¿Un acuerdo real o mera diplomacia?
A pesar del discurso optimista, especialistas y críticos señalan que las tensiones históricas y las diferencias políticas entre ambos países siguen afectando la eficacia real de la cooperación. Mientras Johnson destaca avances, la violencia y el tráfico de drogas continúan siendo graves problemas que afectan a la sociedad mexicana.
Además, la colaboración entre Sheinbaum y Donald Trump en materia de seguridad genera preguntas, dado que la política migratoria y de seguridad del expresidente estadounidense ha sido cuestionada por su dureza y consecuencias humanitarias. No obstante, ambos líderes sostienen que su diálogo ha permitido avances en temas de migración, comercio y seguridad fronteriza.
Priorización de la seguridad y la agenda bilateral pendiente
La llamada telefónica entre la presidenta mexicana y Donald Trump en junio de 2025 evidenció la voluntad de ambos para abordar conflictos de seguridad y otros temas bilaterales críticos. Sheinbaum planteó como prioridades la migración ordenada, la seguridad y el comercio, con el propósito de fortalecer la coordinación y la cooperación en la región.
El embajador Johnson reiteró que el acuerdo firmado (aún pendiente de formalización definitiva) busca garantizar la tranquilidad y bienestar de los pueblos de ambos países. Sin embargo, la falta de avances concretos y la percepción de una estrategia más política que operativa hacen que el tema continúe en el debate público.
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