La presidenta Claudia Sheinbaum arremetió este miércoles contra la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que favoreció al exconsejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello. En su conferencia matutina, calificó el fallo como una muestra más del “cierre de ciclo” de un Poder Judicial que —según dijo— se ha caracterizado por decisiones regresivas, incluyendo, en este caso, “el aval al racismo”.
La Segunda Sala del máximo tribunal concedió un amparo a Córdova para que la Secretaría de Educación Pública (SEP) eliminara su nombre de los libros de texto gratuitos, donde era señalado como ejemplo de “discriminación y violencia” en un apartado dirigido a estudiantes de primaria. La mayoría de los ministros argumentaron que se había vulnerado el derecho al honor del académico al incluirlo en un material oficial sin un proceso jurídico previo que acreditara las acusaciones.
La presidenta no tardó en responder. Desde Palacio Nacional, sostuvo que este acto era un “mensaje preocupante” del Poder Judicial:
“El expresidente del INE, de forma racista y clasista, se expresó contra personas de pueblos indígenas. Esta Corte liberó delincuentes, usurpó funciones y cierra su ciclo promoviendo el racismo”.
Votación dividida y cierre simbólico de una Sala
El fallo no fue unánime. Tres ministros votaron a favor del amparo: Javier Laynez, Jorge Pardo y Alberto Pérez Dayán. En contra se pronunciaron Lenia Batres y Yasmín Esquivel, quienes defendieron el derecho de la infancia mexicana a recibir una educación basada en hechos históricos documentados.
La sentencia se emitió en la última sesión de la Segunda Sala, antes de su desaparición formal dentro del nuevo esquema de reorganización judicial. Para algunos analistas, el caso representó un epílogo simbólico del perfil conservador que, según el oficialismo, caracterizó a esa integración.
El origen del conflicto se remonta a una grabación difundida en 2015, donde se escucha a Córdova imitar —de forma burlona, según sus críticos— el habla de un líder indígena que había acudido al INE. El video provocó un amplio rechazo social y fue retomado por la SEP en el libro “Proyectos comunitarios”, editado en 2023, como ejemplo de discriminación por parte de figuras públicas.
Córdova impugnó la publicación bajo el argumento de que se le difamaba sin fundamentos legales. El Poder Judicial consideró procedente su queja y ordenó retirar las versiones impresa y digital del texto. La SEP deberá ahora reimprimir ese material con las modificaciones requeridas.
El trasfondo político de una sentencia pedagógica
Más allá del aspecto técnico, el caso volvió a exponer la tensión entre el Ejecutivo federal y el Poder Judicial. Sheinbaum —quien ha insistido en la necesidad de reformar el sistema de justicia— utilizó el caso para reiterar su acusación de que los jueces federales actúan bajo sesgos ideológicos:
“Una Corte que no defiende a los pueblos indígenas ni a la educación pública, que protege privilegios y no derechos”.
El gobierno federal no ha informado si impugnará o apelará la resolución, aunque desde la SEP se confirmó que se acatará el fallo de la Corte “en los términos legales correspondientes”.
El episodio también reactivó el debate público sobre la libertad editorial del Estado frente a los derechos individuales de figuras públicas. Mientras algunos sectores ven en el fallo un triunfo del debido proceso, otros consideran que limita la capacidad del sistema educativo para abordar ejemplos reales de racismo estructural.
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