El Parlamento australiano ha aprobado una ley pionera que prohíbe a los menores de 16 años utilizar plataformas de redes sociales como Facebook, TikTok, Instagram, Snapchat y Reddit. Esta medida, destinada a proteger la salud mental y física de los jóvenes, impone multas de hasta 50 millones de dólares australianos (aproximadamente 33 millones de dólares estadounidenses) a las empresas que no cumplen con la normativa.
Objetivos de la legislación
La ley, conocida como Proyecto de ley de enmienda de seguridad en línea (edad mínima de redes sociales) de 2024, busca salvar a los menores de los peligros en línea, incluyendo el acoso cibernético y la exposición a contenido inapropiado. El Primer Ministro Anthony Albanese ha destacado la importancia de esta iniciativa para garantizar un entorno digital seguro para los niños australianos.
La responsabilidad recae en las empresas
Las plataformas tienen un año para establecer mecanismos efectivos que impidan a los menores de 16 años crear cuentas. En caso de incumplimiento, afrontar sanciones significativas. Es importante destacar que la responsabilidad recae en las empresas, no en los padres ni en los menores. Servicios como YouTube y aplicaciones de mensajería como WhatsApp están exentos de esta regulación.
Reacciones y controversias
La ley ha generado opiniones divididas. Mientras algunos la consideran esencial para la protección infantil, expertos en tecnología la califican de «peligrosa» y «torpe», advirtiendo sobre posibles consecuencias no deseadas, como la exclusión digital y la invasión de la privacidad debido a la recolección masiva de datos. Empresas tecnológicas como Meta y Google han expresado preocupaciones sobre la viabilidad de implementar estas restricciones.
Implicaciones internacionales
Australia se convierte en el primer país en adoptar una medida de este tipo, lo que podría influir en otras naciones a considerar regulaciones similares. Países como el Reino Unido y Noruega están observando cerca de la implementación australiana para evaluar la posibilidad de aplicar políticas similares en sus territorios.




