La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, emitió un contundente pronunciamiento en respuesta a las recientes declaraciones del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien prometió reanudar la construcción del muro fronterizo en caso de volver a la Casa Blanca. En su mensaje, Sheinbaum subrayó el compromiso de su gobierno con el respeto a los derechos humanos y la cooperación internacional, enfatizando que «México no será jamás un muro para contener a la migración.»
Las declaraciones de Donald Trump
El 18 de diciembre de 2024, durante un mitin en Texas, Trump reafirmó su intención de continuar la construcción del muro fronterizo, alegando que es necesario para combatir la inmigración ilegal y el narcotráfico. Según el expresidente, la medida fortalecería la seguridad nacional de Estados Unidos y reduciría el flujo de migrantes provenientes de México y otros países de América Latina.
La postura de Claudia Sheinbaum
En una conferencia de prensa realizada el mismo día, Sheinbaum calificó las declaraciones de Trump como «retrógradas y contrarias a los valores de la convivencia internacional.» La mandataria enfatizó que la solución a la crisis migratoria no radica en la construcción de barreras, sino en la implementación de políticas que aborden las causas estructurales de la migración, como la pobreza, la desigualdad y la violencia.
«México ha sido y seguirá siendo un país que promueve el diálogo y la cooperación, no la confrontación. Este tipo de discursos sólo fomentan el odio y la división,» expresó Sheinbaum.
Cooperación internacional como respuesta
La presidenta también destacó los esfuerzos de su administración para trabajar en conjunto con otros países de la región a través de programas como Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro, diseñados para generar empleo y desarrollo en las comunidades más vulnerables de Centroamérica. Sheinbaum instó al gobierno de Estados Unidos a sumarse a estas iniciativas en lugar de recurrir a políticas unilaterales.
«La construcción de muros no detendrá el flujo migratorio ni resolverá los problemas de fondo. Es momento de unirnos para encontrar soluciones que beneficien a todos los países involucrados,» añadió.
Reacciones en la comunidad internacional
Las palabras de Sheinbaum resonaron en la comunidad internacional. Organizaciones de derechos humanos y líderes latinoamericanos aplaudieron su postura, mientras que algunos sectores en Estados Unidos calificaron sus declaraciones como una injerencia en asuntos internos. Sin embargo, expertos en política exterior coinciden en que el enfoque de Sheinbaum refuerza la imagen de México como un país comprometido con la paz y la cooperación.
Las declaraciones de Trump han generado preocupación sobre el futuro de las relaciones entre México y Estados Unidos en caso de que el republicano recupere la presidencia. Analistas advierten que un regreso a políticas de confrontación podría afectar acuerdos comerciales y programas bilaterales en materia de seguridad y migración.
Por su parte, Sheinbaum reiteró su disposición para dialogar con cualquier administración en Estados Unidos, siempre que se respeten los principios de soberanía y derechos humanos. «México está preparado para defender su dignidad y sus valores en cualquier escenario,» concluyó.
