Carlos Alcaraz, el joven tenista español de 22 años, celebró su sexto título de Grand Slam y su ascenso al número 1 del ranking ATP tras vencer a Jannik Sinner en la final del US Open 2025 (6-2, 3-6, 6-1, 6-4) con una noche inolvidable en el exclusivo club privado Chez Margaux, en el Meatpacking District de Manhattan, el 7 de septiembre de 2025. La victoria en el Arthur Ashe Stadium, que marcó su segundo título en el US Open tras el de 2022, desató una euforia que comenzó en los vestuarios con una “guerra de champán” junto a su equipo, incluyendo a su entrenador Juan Carlos Ferrero, y se extendió hasta altas horas en el glamoroso local frecuentado por estrellas como Taylor Swift.
En los vestuarios, Alcaraz fue recibido con botellas de champán, empapando a su equipo en un baño improvisado de celebración. “Todos estábamos cubiertos de alcohol”, relató un testigo a TMZ Sports, destacando el ambiente festivo. La fiesta continuó en Chez Margaux, un club de membresía que cuesta entre 3,000 y 4,000 dólares anuales, con un menú supervisado por el reconocido chef Jean-Georges Vongerichten. El chef compartió una foto con Alcaraz en Instagram, escribiendo: “Felicidades a uno de los grandes campeones”. Durante la velada, Alcaraz posó sonriente con las modelos Brianna Bardhi y Tika Camaj, imágenes que causaron furor en redes sociales, según Infobae y Daily Mail. Bardhi, en particular, compartió una foto con el tenista que se viralizó, mostrando el “brillo de su victoria” aún intacto.
Una noche de estrellas y polémica
La celebración de Alcaraz coincidió con la afterparty de los Premios MTV VMA, lo que atrajo a figuras como Lupita Nyong’o, Jamie Foxx y Cardi B, quien actuó en el club. La campeona femenina, Aryna Sabalenka, también festejó allí la noche anterior, llevando su trofeo. El ambiente de Chez Margaux, con su cocina francesa moderna y un lounge japonés que se transforma en discoteca, se consolidó como el epicentro de la élite deportiva y del espectáculo esa noche. Sin embargo, la presencia de Donald Trump en el estadio, donde fue abucheado, añadió un trasfondo controversial, aunque Alcaraz evitó comentarlo, diciendo a ESPN: “Intenté no pensar en él para no ponerme nervioso”.
Las fotos de Alcaraz con Bardhi y Camaj, compartidas en Instagram, desataron una ola de comentarios en X, como el de @TennisFanatic: “¡Carlitos viviendo su mejor vida! Esa foto con Brianna es todo”. Otros, como @NYC_Sports, destacaron el magnetismo del evento: “Chez Margaux fue el lugar para estar esa noche”. La victoria de Alcaraz no solo marcó un hito deportivo, al superar a Novak Djokovic en semifinales (6-4, 7-6[4], 6-2) y recuperar el número 1, sino que su carisma y estilo lo consolidaron como una estrella global, celebrando con la misma intensidad que juega en la cancha.
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