La Leagues Cup 2025 arrancó con una de las goleadas más escandalosas en su historia. Cruz Azul, campeón vigente de la Concachampions, fue vapuleado 7-0 por el Seattle Sounders en su debut en el torneo binacional entre clubes de la Liga MX y la MLS.
El duelo, que se perfilaba como uno de los más atractivos de la jornada inaugural, terminó en desastre absoluto para los ‘cementeros’. A pesar de llegar motivados tras vencer 4-1 al León en la jornada 3 del Apertura 2025, el conjunto dirigido por Martín Anselmi no encontró respuesta ante la intensidad del equipo de Washington.
Un primer tiempo engañoso y un segundo tiempo catastrófico
En la primera mitad, el partido fue parejo. Cruz Azul incluso logró equilibrar la posesión por momentos, aunque ya mostraba fragilidad en zona baja. El Seattle Sounders aprovechó la pasividad defensiva mexicana para ir construyendo una goleada que se desató en los últimos 45 minutos.
Los goles fueron obra de Yeimar Gómez, el juvenil mexicano Obed Vargas, Jesús Ferreira, Osaze de Rosario, Nouhou Tolo y Pedro de la Vega, quien firmó un doblete y selló el marcador con una espectacular volea que dejó sin opciones al arquero jurado.
Además, al Seattle se le anuló un gol por una polémica posición adelantada que fue ratificada por el VAR, aunque con el resultado ya sentenciado, la controversia resultó irrelevante.
Crisis disfrazada de ilusión y viejos fantasmas celestes
Esta derrota representa un severo golpe anímico para Cruz Azul, que había generado altas expectativas tras conquistar la Concachampions el pasado mayo. La humillación revive los fantasmas de las crisis pasadas, donde el equipo celeste acumulaba tropiezos históricos tanto a nivel local como internacional.
Para la afición, el marcador no solo es preocupante, sino insultante. Las críticas no tardaron en llover en redes sociales, donde se cuestionó tanto la falta de carácter de los jugadores como las decisiones tácticas del cuerpo técnico.
En contraste, los Sounders reafirmaron su calidad como uno de los clubes más sólidos de la MLS. Su plantilla combinó experiencia con talento joven y exhibió una intensidad que borró por completo a un Cruz Azul irreconocible.
Lo que viene para ambos equipos
Con este resultado, Cruz Azul queda obligado a ganar su siguiente encuentro si quiere avanzar de fase en la Leagues Cup. Cualquier otro resultado lo pondría al borde de la eliminación temprana, un escenario inaceptable para una escuadra que hace apenas semanas alzó un título internacional.
Seattle, por su parte, se perfila como uno de los favoritos del certamen, tanto por su forma de juego como por la contundencia mostrada ante un rival de peso. El equipo norteamericano parece haber aprendido de ediciones anteriores y apunta con seriedad al trofeo.
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