La tarde del pasado viernes, tres integrantes de una familia —Carlota “N”, de 74 años, y sus hijos Eduardo “N” y Mariana “N”— fueron trasladados al Penal de Chalco tras ser acusados de disparar contra presuntos invasores de una propiedad, hecho que dejó dos personas muertas y un menor herido. La jueza del caso dictó prisión preventiva justificada para los hijos, mientras que Carlota “N” podrá llevar su proceso en libertad por razones de salud y edad avanzada.
Disputa por terreno derivó en tragedia
Según el Ministerio Público, los hechos se originaron cuando Mariana “N” increpó a una familia que supuestamente había invadido un terreno propiedad de los ahora detenidos. De acuerdo con la acusación, Mariana amenazó verbalmente a los ocupantes y luego regresó acompañada de su madre y su hermano, quienes portaban armas de fuego.
Durante la audiencia inicial, el Ministerio Público relató que Mariana habría instado a su madre a disparar contra los invasores con la frase: “Mátalos mamá, párteles su madre”, y a su hermano Eduardo le ordenó disparar contra un menor de edad. El ataque resultó en el asesinato de un joven de 19 años y un adulto de 51, además de dejar a un menor gravemente herido.
La jueza calificó como legal la detención de los tres acusados, realizada con base en una orden de aprehensión. Aunque se solicitó su vinculación a proceso por el delito de homicidio calificado y tentativa de homicidio, la defensa pidió la duplicidad del término constitucional, por lo que la audiencia fue suspendida hasta el 9 de abril a las 9:00 horas.
Mientras tanto, la jueza ordenó prisión preventiva para Eduardo y Mariana, con excepción de Carlota, quien podrá enfrentar el proceso en libertad bajo ciertas condiciones.
Carlota “N” enfrentará el proceso en libertad
La defensa argumentó que Carlota, de 74 años y con diabetes insulinodependiente, necesita atención médica constante. Por ello, se solicitó su arraigo domiciliario con brazalete electrónico y firmas periódicas. La jueza aceptó la solicitud, condicionando su libertad al comprobante de arraigo y cumplimiento de las medidas cautelares.
Por su parte, la defensa de Mariana solicitó que se evaluara su estado de salud mental, alegando que padece bipolaridad, episodios psicóticos y epilepsia. La jueza ordenó que peritos de la Fiscalía determinen si Mariana puede ser inimputable o debe ser internada en un centro psiquiátrico durante el proceso.
La audiencia fue suspendida luego de que Eduardo y Mariana solicitaran acceso a su tratamiento médico. Será el próximo 9 de abril cuando se reanude la audiencia para definir si los tres familiares serán vinculados a proceso penal por homicidio y tentativa de homicidio.
El caso ha generado un fuerte impacto en la opinión pública del Estado de México y la Ciudad de México, al tratarse de un conflicto vecinal que escaló hasta convertirse en un doble homicidio, con implicaciones legales y sociales que continúan en desarrollo.
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