Estados Unidos, bajo la administración del presidente Joe Biden, anunció este martes la exclusión de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo, mientras que el régimen de Miguel Díaz-Canel confirmó la liberación gradual de 553 presos políticos. Ambos anuncios contaron con la mediación del Vaticano, Brasil y Colombia, marcando un posible acercamiento bilateral tras años de tensiones.
La liberación de presos políticos: un gesto significativo
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX) informó que la liberación incluye a personas encarceladas por diversos delitos, incluidos participantes de las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 (11J), las más grandes en décadas en la isla. Según la Casa Blanca, las excarcelaciones comenzarán «en un plazo relativamente corto».
La ONG Prisoners Defenders reportó que, hasta noviembre de 2024, había 1,148 presos por razones políticas en Cuba, mientras que Justicia 11J señaló que 554 manifestantes del 11J seguían encarcelados con penas de hasta 20 años.
Esta sería la primera excarcelación masiva desde 2019, cuando el régimen indultó a 2,604 reclusos. En 2015, se liberaron a 3,522 presos como gesto humanitario durante la visita del papa Francisco.
Impacto económico y antecedentes
Cuba fue incluida en la lista de países patrocinadores del terrorismo en 2017 durante el primer mandato de Donald Trump, debido a la presencia en la isla de miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia.
Estar en esta lista conlleva restricciones financieras severas, incluyendo la prohibición de venta de armas y limitaciones para transacciones internacionales. Estas sanciones, sumadas a la pandemia y políticas internas, han agravado la crisis en Cuba, caracterizada por la escasez de alimentos, medicinas y combustible, así como una inflación creciente.
Reacciones internacionales
Postura del régimen cubano
El gobierno de Miguel Díaz-Canel calificó la decisión de Washington como “un paso en la dirección correcta”, aunque subrayó que el bloqueo económico y otras sanciones estadounidenses permanecen vigentes.
«La guerra económica sigue intacta», afirmó el MINREX, señalando que el próximo gobierno de Trump podría revertir las medidas actuales.
Críticas desde Estados Unidos
El senador republicano Ted Cruz calificó la medida de «inaceptable», asegurando que el régimen cubano continúa promoviendo el terrorismo.
«Trabajaremos para revertir esta medida y minimizar los daños que pueda causar», afirmó.
El congresista Carlos Giménez anunció que, con Donald Trump nuevamente en la presidencia y Marco Rubio liderando la política exterior, buscarán endurecer la presión contra el régimen cubano.
Respaldo internacional
- Brasil celebró la decisión como un «acto de reparación y restablecimiento de la justicia».
- Colombia, a través del presidente Gustavo Petro, calificó la medida como «un gran avance» en el diálogo entre Estados Unidos y América Latina.
«Levantar bloqueos, aunque sea parcialmente, es un gran avance», destacó Petro.
Perspectivas bajo la nueva administración de Trump
La exclusión de Cuba de la lista ocurre apenas días antes de que Donald Trump asuma nuevamente la presidencia el 20 de enero. Trump, quien ya reincorporó a Cuba en la lista durante su primer mandato, ha prometido una política de línea dura hacia la isla.
Con Marco Rubio como designado secretario de Estado, se anticipa una posible reversión de las medidas adoptadas por Joe Biden y un endurecimiento en las sanciones hacia Cuba.
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