más

    México, tercer país más afectado por el crimen organizado a nivel mundial

    México se posicionó como el tercer país con mayor presencia de crimen organizado en el mundo, solo detrás de Myanmar y Colombia, según el Índice Global de Crimen Organizado 2025. El informe advierte que el país enfrenta una estructura delictiva compleja, con expansión de mercados ilegales y baja capacidad institucional para responder al fenómeno.

    Criminalidad en ascenso y diversificación del delito

    El estudio, elaborado por la Global Initiative Against Transnational Organized Crime (GIATOC), otorgó a México una calificación de 7.68 sobre 10 en criminalidad total, superando su registro previo de 7.57 en 2023. Con ello, el país confirma su tendencia ascendente en actividades ilícitas, dominadas por cárteles con alto poder de fuego y control territorial.

    México encabeza la lista global en mercados criminales, con 8.27 puntos. Las actividades con mayor peso son el tráfico de drogas sintéticas, la extorsión y el tráfico de armas, cada una con calificaciones de 9 puntos. El Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) continúan como principales actores delictivos, diversificando su participación en delitos como trata de personas, explotación sexual, robo de combustibles, delitos ambientales y cibercrimen.

    La trata y el tráfico de personas afectan sobre todo al sur del país —Chiapas, Oaxaca y Guerrero—, donde comunidades indígenas resultan las más vulnerables. Además, la migración y las condiciones de pobreza alimentan nuevas redes criminales en las rutas hacia EE. UU.

    Extorsión y economía ilícita en expansión

    El informe también detalla que sectores productivos como la agricultura, el comercio y la pesca se han convertido en blanco de extorsión. La industria del aguacate en Michoacán y la pesca ribereña en el Pacífico están particularmente afectadas por cobros de piso y control territorial.

    La proliferación de bienes falsificados —desde medicamentos hasta ropa— sigue alimentando la economía criminal. Zonas como Tepito, en la Ciudad de México, y mercados fronterizos del norte del país operan como centros de distribución de productos ilícitos.

    El tráfico de armas constituye otro factor crítico: se estima que existen más de 13 millones de armas no registradas en territorio nacional, muchas de ellas provenientes de EE. UU. y empleadas por grupos delictivos para consolidar su dominio local.

    Delitos ambientales y control del territorio

    La GIATOC subraya que los delitos ambientales se han incorporado a la dinámica del crimen organizado en México. La tala ilegal, el tráfico de especies protegidas —como jaguares y reptiles— y el control de minas o ductos de combustibles son prácticas cada vez más frecuentes. Estas redes criminales actúan con poder territorial y capacidad de corromper autoridades locales.

    Un Estado con baja resiliencia institucional

    México obtuvo una calificación de 4.50 en resiliencia institucional, ubicándose en el puesto 111 de 193 países analizados. El informe atribuye esta debilidad a la corrupción, la captura del sistema judicial y la falta de independencia entre poderes.

    La militarización de la seguridad pública, con la Guardia Nacional como eje operativo, no ha revertido la percepción de inseguridad. Por el contrario, la presencia de organizaciones delictivas en estructuras de gobierno, prisiones y fuerzas de seguridad se mantiene como uno de los principales obstáculos.

    El documento menciona que “los sobornos sistemáticos y el control de cárceles por parte de los cárteles mexicanos” comprometen seriamente la autoridad del Estado. A ello se suma un sistema judicial saturado, con limitados recursos para procesar delitos de alto impacto.

    Radiografía del crimen organizado en México

    Entre los hallazgos del informe destacan:

    • México ocupa el tercer lugar mundial en crimen organizado.

    • Se encuentra entre los cinco países con mayor corrupción estatal.

    • Figura en el top 3 global en tráfico de drogas sintéticas y fentanilo.

    • Integra los 25 peores sistemas penitenciarios del planeta.

    • Está entre los 30 países más vulnerables al lavado de dinero.

    • Ocupa posiciones rezagadas en cooperación internacional contra el crimen.

    Un desafío global que rebasa la capacidad estatal

    El Índice Global de Crimen Organizado advierte que el crimen transnacional se adapta más rápido de lo que los Estados logran responder. De 57 países con alta criminalidad y baja resiliencia en 2023 se pasó a 66 en 2025, reflejando un deterioro generalizado.

    “Al igual que una hidra de múltiples cabezas, los grupos criminales se adaptan rápidamente, aprovechando los conflictos emergentes y los avances digitales”, señala el informe.

    México enfrenta el reto de romper la relación estructural entre crimen y corrupción, fortalecer la independencia judicial y recuperar el control institucional frente a redes delictivas que, cada año, expanden su poder económico, territorial y político.

    También te puede interesar: Polémica al poner estrella en Hollywood con el nombre de Carlos Manzo

    Artículos relacionados