Javier “Chicharito” Hernández, el máximo goleador histórico de la selección mexicana, se encuentra en el centro de la polémica tras compartir una serie de mensajes que promueven discursos considerados misóginos en sus redes sociales.
En lugar de destacar por su desempeño con las Chivas de Guadalajara, el delantero se ha convertido en una figura del llamado “coaching masculino”, alineado con corrientes ideológicas como el redpill y las tradwives.
En uno de sus más recientes videos, Chicharito afirma que las mujeres “están fracasando” y que deben “aprender a recibir y a honrar la masculinidad”. Bajo un tono aparentemente motivacional, el mensaje refuerza estereotipos de género, asegurando que “la sociedad se ha vuelto hipersensible” por culpa de las mujeres.
Según el jugador, la feminidad se ha distorsionado y es urgente que ellas “encarnen su energía femenina cuidando, nutriendo, recibiendo, multiplicando, limpiando y sosteniendo el hogar”.
Las frases han desatado una ola de críticas en redes sociales. Usuarios, especialistas en género y periodistas han señalado la cercanía del discurso de Chicharito con las ideologías redpill, una corriente que sugiere que las mujeres manipulan a los hombres a través de su apariencia y estatus, y que promueve el regreso a roles tradicionales rígidos.
El video ha sido ampliamente difundido y, aunque el jugador no ha respondido directamente a las críticas, mantiene su postura.
Redpill, tradwives y discursos de odio en redes
El mensaje también ha sido interpretado como una adhesión tácita al modelo de las tradwives, un movimiento que busca que las mujeres retomen su rol de esposas sumisas y amas de casa, renunciando a su autonomía. En otro video anterior, el futbolista lanzó un comentario irónico: “Entonces quieres a un hombre proveedor, pero para ti limpiar es opresión patriarcal… interesante”.
Chicharito ha sido influenciado notoriamente por Diego Dreyfus, un ingeniero sin formación clínica que se presenta como “coach de vida” y quien ha ganado popularidad promoviendo modelos de masculinidad centrados en el éxito económico, la autosuficiencia y el liderazgo viril.
Dreyfus y Hernández mantuvieron un canal conjunto en YouTube, cerrado luego de la separación del futbolista y Sarah Kohan, exesposa del jugador. Aun así, el delantero continúa defendiendo su relación con el coach, a quien describe como “alguien que evitó que echara a perder por completo mi carrera”.
El auge de este tipo de contenido no es un fenómeno aislado. Figuras como Dreyfus, el Temach y otros influencers mexicanos han encontrado eco en plataformas como Telegram, Reddit y YouTube, donde construyen comunidades que replican ideas misóginas disfrazadas de empoderamiento masculino.
Un informe de la Universidad Iberoamericana ha advertido sobre el peligro de estos discursos, pues pueden contribuir a normalizar la violencia de género, alimentar resentimientos y generar fantasías de venganza contra las mujeres.
Lo que comenzó como una estrategia personal de crecimiento parece haberse desbordado en un canal de propaganda ideológica. Chicharito Hernández, en lugar de asumir el papel de referente deportivo nacional, ahora se enfrenta a un creciente rechazo social por difundir ideas que muchos consideran retrógradas y peligrosas.
También te puede interesar: Catar busca organizar los Juegos Olímpicos de 2036 pese a críticas por derechos humanos
