En un operativo conjunto entre fuerzas federales y estatales, nueve presuntos integrantes de la banda delictiva conocida como ‘M4’ fueron detenidos en el Estado de México. La célula, encabezada por Erick ‘N’, alias ‘M4’, operaba en municipios del Valle de México y está acusada de múltiples delitos, entre ellos homicidio, secuestro y extorsión contra transportistas, comerciantes y vecinos. Las capturas se realizaron en el marco de la Estrategia Nacional contra la Extorsión, confirmaron autoridades.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), el grupo criminal tenía presencia en Atizapán de Zaragoza, Cuautitlán Izcalli, Nicolás Romero, Tepotzotlán y Tlalnepantla.
Sus operaciones se caracterizaban por ataques armados, cobro de cuotas y amenazas con violencia letal. El líder, Erick ‘N’, era considerado el segundo al mando de una organización fundada por David ‘N’, alias ‘El Davis’, detenido en 2021 y sentenciado a 62 años de prisión por homicidio.
Extorsiones y violencia bajo el mando de ‘M4’
Los hechos que llevaron a la detención ocurrieron en Nicolás Romero, cuando los sospechosos intentaban extorsionar a un operador de transporte público. La víctima fue amenazada con armas de fuego para obligarla a entregar dinero. Entre los detenidos se encuentran Marco Antonio ‘N’, Alejandro ‘N’, José Manuel ‘N’, Jhoan ‘N’, Brandon Ricardo ‘N’ y Gerardo ‘N’.
Las investigaciones señalan que la banda también realizaba ataques directos contra negocios. En una barbería de Nicolás Romero, presuntamente Erick ‘N’ disparó contra el local como advertencia al dueño que se negó a pagar la cuota. El caso se suma a un ataque armado en febrero pasado en la colonia El Tráfico, donde un hombre murió tras recibir varios disparos.
Uno de los aspectos más graves revelados por las autoridades fue la infiltración de la célula en la Fiscalía local. Un joven identificado como Arturo ‘N’, que realizaba su servicio social en la institución, habría filtrado información sobre operativos y participado en actividades criminales, incluidas ejecuciones. Arturo ‘N’ ya enfrenta una orden de aprehensión por homicidio.
En paralelo, Eduardo ‘N’, alias ‘El Diamante’, fue detenido en otro operativo. Se le vincula al mismo asesinato ocurrido en febrero. Con estas capturas, la estructura de ‘M4’ quedó severamente debilitada, aunque autoridades no descartan la existencia de miembros que aún operen en la región.
Consecuencias judiciales y seguridad en el Valle de México
Los nueve capturados fueron trasladados al Reclusorio Barrientos, en Tlalnepantla, donde quedaron a disposición de un juez. Entre los cargos destacan homicidio, secuestro y extorsión agravada. Jhoan ‘N’ y Brandon ‘N’ enfrentan acusaciones específicas por secuestro con resultado de muerte en contra de un chofer de transporte público.
El gobierno mexiquense destacó que este golpe a la delincuencia organizada es estratégico, dado que la célula tenía control sobre amplias zonas de transporte y comercios. Sin embargo, especialistas en seguridad advierten que la fragmentación de bandas no siempre implica una reducción de violencia. En muchos casos, abre la puerta a nuevos enfrentamientos por el control territorial.
Vecinos de Nicolás Romero y Tlalnepantla manifestaron su preocupación, pues aunque celebran las detenciones, consideran que la desarticulación de una banda no elimina la amenaza de otras que buscan ocupar su lugar. Autoridades federales aseguraron que reforzarán la presencia militar y policial en el Valle de México, con operativos coordinados para contener el repunte de extorsiones y homicidios.
La caída de la banda ‘M4’ representa un triunfo para las autoridades, pero también evidencia los riesgos de infiltración institucional y la persistencia del crimen organizado en el Estado de México. La batalla, reconocen los propios funcionarios, está lejos de concluir.
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