Un video difundido en el canal de Telegram Yunashev Live del periodista ruso Alexander Yunashev captó la minuciosidad con la que el personal de Kim Jong-un limpió los muebles y objetos que el líder norcoreano tocó durante su reunión con Vladimir Putin el 3 de septiembre en la Casa de Huéspedes Estatal Diaoyutai, tras un desfile militar en Beijing. Las imágenes muestran a dos asistentes desinfectando la silla, los brazos de madera y la mesa contigua, además de retirar el vaso que Kim usó, en un aparente esfuerzo por eliminar cualquier rastro de su ADN, según Daily Mail.
Un protocolo de seguridad extrema
La limpieza, descrita como “forense” por Yunashev, refleja la paranoia de Kim Jong-un, quien busca proteger su material genético ante posibles análisis por parte de servicios de inteligencia extranjeros, como los de China o Rusia. Esta práctica no es exclusiva de Kim: desde 2017, el Servicio Federal de Protección de Rusia (FPS) recolecta los desechos corporales de Putin en bolsas selladas durante sus viajes al extranjero para evitar que rivales obtengan información sobre su salud, según reportes de Regis Gente y Mikhail Rubin citados por The Guardian.
Un video de 2019 mostró a un guardaespaldas de Putin saliendo de un baño en Francia con un maletín sospechoso, según Paris Match.
Contexto del encuentro
La reunión ocurrió tras un desfile militar en la Plaza Tiananmen para conmemorar el 80º aniversario de la victoria sobre Japón en la Segunda Guerra Mundial, donde Kim, Putin y Xi Jinping aparecieron juntos por primera vez, según Reuters.
El evento, al que asistieron 26 líderes mundiales, incluyendo al presidente iraní Masoud Pezeshkian, fue visto como un desafío al orden global liderado por Occidente, con analistas denominándolo un “eje de agitación” por su postura anti-OTAN, según The Guardian. Kim, en su primera visita a China desde 2019, aprovechó para reforzar lazos con Putin, prometiendo “todo lo posible” para apoyar a Rusia en Ucrania, mientras Putin elogió a las fuerzas norcoreanas por su “valentía” en Kursk, donde se estima que 600 a 2,000 soldados norcoreanos han muerto, según Sky News.
Implicaciones diplomáticas y críticas
El encuentro, que incluyó 90 minutos de charlas con delegaciones y una reunión privada en el auto de Putin, subraya el tratado de defensa mutua de 2024 entre Rusia y Corea del Norte, ambos bajo sanciones internacionales, según TASS. Donald Trump criticó el evento en Truth Social, acusando a los líderes de “conspirar” contra EE. UU., a lo que el Kremlin respondió que las relaciones son para beneficio propio, no contra terceros, según Sky News. En X, usuarios como @MarioNawfal destacaron la alianza militar, generando 1.5 millones de interacciones.
La limpieza obsesiva de Kim, aunque no nueva, resalta su desconfianza incluso entre aliados y refuerza la percepción de su régimen como hermético. Mientras Beijing proyecta poder global, este incidente pone en evidencia las dinámicas de control y paranoia que caracterizan a líderes como Kim y Putin en un escenario geopolítico cada vez más polarizado.
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