El papa León XIV manifestó su cercanía y solidaridad con las víctimas de las lluvias torrenciales que afectaron varios estados de México, provocando al menos 80 muertes. El pontífice aseguró que reza por las familias afectadas y pidió por la recuperación de las comunidades golpeadas por la tragedia.
El Papa reza por las víctimas y llama a la humildad
Desde la ventana del Palacio Apostólico, tras el rezo del Ángelus, el líder de la Iglesia católica afirmó: “Expreso mi cercanía y afecto a las poblaciones del México oriental afectadas en los últimos días por los aluviones. Rezo por las familias y por todos aquellos que han sufrido por esta calamidad”. También confió a la intercesión de la Virgen María “las almas de los difuntos”.
El Gobierno de México informó que los estados más afectados son Hidalgo, Veracruz, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí. Las lluvias intensas provocaron deslaves, daños en infraestructura, viviendas destruidas y el desplazamiento de miles de personas. El balance preliminar reporta 18 desaparecidos y múltiples comunidades incomunicadas.
Durante su mensaje dominical, el papa León XIV aprovechó para hacer una reflexión sobre la humildad y la responsabilidad. “Queridos hermanos y hermanas, no tengamos miedo de reconocer nuestros errores, de ponerlos al descubierto asumiendo nuestra responsabilidad y confiándolos a la misericordia de Dios”, señaló. “Así podrá crecer su Reino, que no pertenece a los soberbios, sino a los humildes”.
El pontífice subrayó que la fe no debe ocultar los errores ni los pecados, sino afrontarlos para reconstruir la confianza. Recordó que la parábola del fariseo y del publicano, relatada por el evangelista Lucas, enseña que la verdadera oración nace de la humildad. “El primero exalta sus méritos, el segundo se presenta ante Dios tal como es. Hagamos lo mismo”, exhortó.
Llamado global por la paz y la solidaridad
Además, León XIV pidió a los fieles mantener la oración constante por las víctimas de las guerras en curso. “Continúa incesante nuestra oración por la paz, especialmente mediante el rezo comunitario del Santo Rosario”, dijo el Papa. Aseguró que en cada rosario se reflejan “el sufrimiento y la esperanza de los niños, las madres, los padres y los ancianos víctimas de la guerra”.
El pontífice reconoció el esfuerzo de quienes, “con perseverancia confiada”, mantienen la esperanza en tiempos de violencia. “Bienaventurados los que trabajan por la paz”, exclamó al finalizar su mensaje.
Mientras el Gobierno mexicano coordina los esfuerzos de rescate y reconstrucción, miles de damnificados esperan el apoyo de las autoridades para recuperar sus hogares y medios de vida. En muchas zonas afectadas, las lluvias siguen generando riesgo de nuevos deslaves.
La Secretaría de Gobernación informó que se activaron fondos de emergencia y se envió ayuda humanitaria a las comunidades más golpeadas. Sin embargo, la magnitud de los daños mantiene bajo presión a los equipos de protección civil.
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