La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió reducir la tasa de interés en 25 puntos base, ubicándola en 7.0 por ciento, y abrió la posibilidad de mantenerla sin cambios a inicios de 2026. La autoridad monetaria indicó que la medida responde al panorama inflacionario y a la debilidad de la actividad económica, así como a posibles impactos de ajustes en políticas comerciales globales y el entorno de incertidumbre internacional.
El recorte fue respaldado por la gobernadora Victoria Rodríguez y los subgobernadores Galia Borja, Gabriel Cuadra y Omar Mejía. Jonathan Heath, en cambio, defendió mantener la tasa en 7.25 por ciento. Banxico señaló que los ajustes futuros serán congruentes con la trayectoria necesaria para que la inflación general converja a la meta de 3.0 por ciento en el plazo previsto, pese a que los pronósticos de inflación a corto plazo fueron revisados al alza.
Pausa monetaria y expectativas para el primer trimestre
En el primer trimestre de 2026, Banxico tiene previstas dos reuniones de política monetaria: el 5 de febrero y el 26 de marzo. Se espera que la autoridad mantenga la tasa sin movimientos, adoptando lo que los analistas de Banamex califican como una “pausa prudente” ante presiones inflacionarias iniciales. Posteriormente, una vez que se confirme que los aumentos de precios son acotados, la Junta retomaría los recortes, con la posibilidad de cerrar 2026 en 6.50 por ciento.
Analistas de Banorte destacaron que los cambios en la guía futura reflejan la intención del banco de brindar una visión más completa de su estrategia, la cual será detallada en el Programa Monetario 2026, previsto para finales de enero. Por su parte, Alberto Ramos, economista de Goldman Sachs para América Latina, explicó que la pausa se justifica por la proximidad de la tasa real ex ante al 3.0 por ciento, la aceleración de la inflación subyacente y la rigidez de la inflación de servicios.
Riesgos y ajustes fiscales
Banxico evaluará los efectos de los ajustes fiscales y del incremento al salario mínimo en 2026, que podrían impactar de manera transitoria la inflación. Ramón de la Rosa, director de estrategias de mercado en Actinver, señaló que los efectos se materializarán durante la primera quincena de enero y podrían llevar al banco central a pausar los recortes de tasa.
Entre los riesgos al alza identificados por Banxico se encuentran: depreciación del peso, persistencia de la inflación subyacente, presiones de costos, conflictos geopolíticos, medidas comerciales de países externos y afectaciones climáticas, factores que serán vigilados para ajustar la política monetaria en caso de ser necesario.
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