Petróleos Mexicanos (Pemex) adjudicó los primeros cinco de los nuevos contratos mixtos contemplados en su Plan Estratégico 2025-2035, con firma programada para el próximo 19 de diciembre. El director general de la empresa, Víctor Rodríguez Padilla, informó a inversionistas sobre la adjudicación, que generó bonos acumulados por aproximadamente 49.48 millones de dólares al obtener el máximo porcentaje de flujo de efectivo concursado.
Los campos adjudicados son terrestres: Tamaulipas-Constituciones, Cuervito, Sini-Caparroso, Agua Fría y Tupilco Terciario. Las empresas ganadoras fueron Consorcio Petrolero 5M del Golfo (C5M) —que obtuvo dos contratos—, Geolis, CECIGSA y Petrolera Miahuapán, todas mexicanas y sin participación de grandes jugadores internacionales, según documentos internos a los que tuvo acceso Reuters y El Economista.
Detalles de los proyectos y proyecciones
- Tamaulipas-Constituciones (norte, Tampico-Misantla): Crudo pesado y gas. Pemex participará con 80%; proyección de 78.5 millones de barriles de petróleo y 80,900 millones de pies cúbicos de gas en 20 años.
- Sini-Caparroso (sur): Crudo superligero (41° API). Pemex con 84%; 23 millones de barriles y 58,000 millones de pies cúbicos de gas.
- Cuervito (norte, Cuenca de Burgos): Enfocado en gas (262,000 millones de pies cúbicos proyectados).
- Agua Fría (cerca del Golfo): Crudo mediano y gas; 129 millones de barriles y más de 200,000 millones de pies cúbicos de gas.
- Tupilco Terciario: Detalles limitados, pero parte del paquete sureste.
Estos contratos forman parte de un esquema mixto habilitado por reformas recientes, donde Pemex aporta asignaciones y recibe bonos por inversiones previas, mientras privados asumen riesgos operativos y financieros.
Contexto del modelo mixto y ausencia de majors
La adjudicación marca el inicio de hasta 11 contratos planeados para 2025 (de un total de 21 en el plan a 2030), orientados a campos maduros con potencial de recuperación. Aunque atrajeron interés inicial de 40 empresas, las ganadoras son firmas locales medianas, reflejando cautela de grandes petroleras ante condiciones contractuales y riesgos fiscales.
Pemex busca sumar producción adicional —hasta 69,400 barriles diarios en 2025 de 10 contratos— para compensar declinación natural y alcanzar metas de 1.8 millones de barriles diarios hacia 2030.
La firma del 19 de diciembre formalizará estos primeros acuerdos, inyectando recursos vía bonos y atrayendo inversión privada sin ceder control mayoritario. Analistas ven el proceso como positivo para finanzas de Pemex, aunque destacan que el impacto productivo será gradual.
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