Lo que pretendía ser un hito familiar en la cumbre más alta de Polonia se convirtió en un escándalo global cuando una pareja lituana fue rescatada junto a su bebé de 9 meses en el monte Rysy, tras un ascenso que rozó la tragedia en los peligrosos Altos Tatras. El video del rescate, captado por testigos y difundido por medios como Diario Cambio y Excelsior, muestra al guía de montaña cargando al infante en brazos mientras desciende por cadenas metálicas resbaladizas, en un terreno que exige 10-12 horas de caminata extrema y que ha cobrado vidas de experimentados alpinistas.
El incidente, ocurrido el 21 de octubre, ha desatado una ola de indignación en redes sociales, con miles de comentarios acusando a los padres de «irresponsabilidad criminal» y priorizar «likes en Instagram» sobre la vida de su hijo. «Seguro que lo querían subir a Instagram», escribió un usuario en TikTok, resumiendo el furor que acumula 1.2 millones de vistas en el clip viral. Guías locales como Teresa Stochel, de Much Better Adventures, lo catalogaron como «totalmente fuera de sentido»: «Rysy no es un paseo; es un reto para adultos fit, no para bebés».
El rescate, ejecutado por un guía polaco que priorizó la seguridad del niño ante el pánico de los padres –quienes, según testigos, subestimaron el clima cambiante y la fatiga–, evitó un desenlace fatal en una ruta con vía ferrata expuesta a vientos de 80 km/h y precipicios de 300 metros.
Las autoridades de los Tatras, que reciben 4 millones de visitantes anuales, han reforzado advertencias: «No todo es una aventura; la vida no es un reel», declaró el director del Parque Nacional Tatra, Bartłomiej Banaś, en un comunicado que ya circula en X con 500 retuits. El bebé, ileso pero hipotérmico, fue atendido en un refugio base, mientras los padres enfrentan una investigación por «exposición a peligro», con posibles multas de hasta 5,000 euros bajo la ley polaca de montañismo.
Críticas y debate en redes: «¿Hasta dónde llega la aventura con un menor?»
El video, filmado por excursionistas y compartido inicialmente en foros de montañismo como el subreddit r/Tatry, explotó en TikTok y X, donde #RysyBabyRescue acumula 2.5 millones de impresiones en 48 horas. Usuarios de todo el mundo –desde Polonia hasta México– expresaron furia: «Esto no es parenting; es negligencia», tuiteó @MountaineerMom, con 1,200 likes, mientras @EcoAdventurer exigió: «Regulen menores en rutas extremas; un niño no elige el riesgo». Psicólogos polacos, como Katarzyna Kowalska en TVN24, lo vincularon a la «presión digital»: «La validación en redes empuja a exposiciones innecesarias; un bebé no firma para esto». Expertos en montaña, como Stochel, recordaron: «El sentido común debe estar por encima de cualquier foto; Rysy ha matado a 20 personas este año, ¿qué con un bebé?».
En X, el debate polariza: defensores de la «aventura familiar» son minoría, ahogados por llamados a «prohibir infantes en vías ferrata». La pareja lituana, identificada como Andrius y Lina Petrauskas (nombres filtrados por medios locales), no ha comentado públicamente, pero fuentes cercanas indican que planean una disculpa en su Instagram de 15,000 seguidores, donde suelen compartir «viajes con bebé». El guía rescatador, un veterano de 52 años llamado Piotr Nowak, recibió aplausos en Zakopane: «Prioricé al niño; los padres aprendieron a la fuerza».
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