Un cruce verbal que escaló a golpes de puño sacudió el programa de streaming Hacemos lo que podemos de Undertake Media, cuando el histórico conductor Humberto de Vargas, figura icónica de la TV uruguaya en Canal 10, se enfrentó físicamente al sindicalista y periodista deportivo Gustavo Ricci. La discusión, motivada por irregularidades en gastos detectadas en una auditoría al dirigente Jorge «Fogata» Bermúdez de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS), obligó a cortar la transmisión en vivo y derivó en el despido inmediato de De Vargas por el canal.
El incidente ocurrió el 1 de octubre, durante el editorial semanal de De Vargas en el programa conducido por Richard Galeano. Antes de llegar al estudio, De Vargas advirtió por mensaje: «Más vale que Ricci se vaya antes de que llegue… voy muy caliente con el acomodo de los sindicalistas», refiriéndose al caso Bermúdez, quien devolvió fondos del gremio tras la auditoría. Ricci, exfuncionario de OSE (empresa pública de agua) y orgulloso sindicalista con 39 años de experiencia, desafió: «¡Qué venga! Y hablamos».
Al ingresar, De Vargas interrogó a Ricci: «¿Usted trabaja? ¿Qué hace?», insistiendo en su rol en la Gerencia de Capital Humano de OSE. Ricci replicó: «Hacés preguntas pelotudas y de cagón, porque no llamás». El insulto encendió a De Vargas: «Soy de barrio. Me decís dos veces ‘cagón’ y te cazo del cogote». Se quitó los lentes y se abalanzó, iniciando un forcejeo captado por cámaras antes del corte. Galeano intervino, corriendo a Ricci contra la pared, mientras el productor Mauro Imbríaco detenía a De Vargas.
Despido inmediato: «Cruzó el límite» y un bochorno reconocido
En la emisión siguiente, Galeano confirmó el despido: «Lo que pasó no estuvo bueno. No aportó nada. Por cómo vino y lo que se vio al aire, él provocó lo que pasó». Relató que De Vargas se disculpó: «Me reconoció que fue un bochorno… como es de barrio, reacciona de esa manera». Ricci se fue del estudio, y Galeano comunicó: «Le dije que lo mejor es que deje de formar parte de Undertake Media. Ese es el límite». De Vargas, afectado por mensajes masivos, decidió aislarse temporalmente, pero el canal lo desvinculó en «mejores términos».
El video de la pelea acumuló millones de vistas en X y TikTok, con memes como «De Vargas vs. Ricci: el editorial más físico». El caso Bermúdez, con gastos sin justificar en el Fondo de Formación de la FUS, encendió el debate sobre «acomodos sindicales», un tema sensible en Uruguay donde OSE enfrenta auditorías por corrupción. De Vargas, con trayectoria en Canal 10 desde los 80, ha tenido escándalos previos, como su despido en 2022 por conducir ebrio y amenazar policías. Ricci, exdirigente de OSE, defendió su rol: «Orgulloso de ser sindicalista».
En Uruguay, donde los sindicatos son clave en el Frente Amplio, el forcejeo resalta tensiones entre medios y gremios. Galeano, al pedir disculpas a Ricci, enfatizó: «Una puteada es entretenimiento, pero golpes cruzan límites». El incidente, sin heridos graves, deja a De Vargas fuera de Undertake Media, pero su «reacción de barrio» ya es anécdota viral. En un país de debates acalorados, este «cazador del cogote» pasó de conductor a protagonista de un bochorno televisivo.
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