Al menos 20 personas resultaron heridas en un tiroteo ocurrido la noche del domingo en Croydon Park, un barrio del oeste de Sídney, Australia. El presunto responsable, Artemios Mintzas, de 60 años, fue detenido por la policía local y no presenta aparentes vínculos con terrorismo, aunque se espera que enfrente múltiples cargos relacionados con el uso de armas de fuego.
El ataque se prolongó durante aproximadamente dos horas, durante las cuales Mintzas abrió fuego con un rifle de alta potencia contra automóviles, autobuses y peatones al azar, realizando entre 50 y 100 disparos. Un hombre permanece hospitalizado en estado grave, mientras otras 19 personas sufrieron heridas leves, según informó la Policía de Nueva Gales del Sur.
Durante el enfrentamiento, Mintzas recibió lesiones leves, incluida una herida en la cuenca del ojo, y posteriormente fue dado de alta para ser puesto bajo custodia en la estación de policía de Burwood.
El superintendente interino Stephen Parry destacó que Mintzas había tenido muy pocas interacciones con las autoridades en los últimos 20 años y que no existían antecedentes de violencia significativa. La policía incautó un rifle calibre .30 en el apartamento del hombre, ubicado sobre un negocio en Georges River Road, junto con otros artículos que podrían dispararse en rápida sucesión. Los investigadores continúan examinando las dos escenas del crimen y evaluando cómo obtuvo el arma y si contaba con licencia legal.
Policía destaca coordinación táctica y ausencia de víctimas fatales
El subcomisario interino Trent King aseguró que el incidente no está relacionado con drogas, alcohol, crimen organizado ni terrorismo. Vecinos relataron que escucharon los primeros disparos alrededor de las 8:00 p. m., y luego observaron la intervención de la policía táctica.
Según King y el comisionado Mal Lanyon, las cámaras corporales de los oficiales muestran lo cerca que estuvieron de ser alcanzados por los disparos. Uno de los agentes involucrados llevaba apenas cinco semanas en la academia.
Cinco de los heridos fueron atendidos en hospitales locales, incluido un hombre de unos 50 años que recibió un disparo en el cuello mientras viajaba en un vehículo, siendo la única persona con heridas directas por bala. Su vida no corre peligro, aunque el trauma psicológico de todos los afectados ha sido destacado por las autoridades.
Lanyon calificó el suceso como “increíble” por la fortuna de que no hubiera víctimas fatales y destacó que, en sus 35 años de servicio, ha sido uno de los pocos incidentes de esta magnitud que ha enfrentado.
Investigaciones en proceso
El ataque ha generado preocupación entre los residentes y ha puesto de relieve la importancia de la preparación de la policía ante hechos de violencia sin precedentes. Las autoridades australianas trabajan para reforzar la seguridad y mantener informada a la población mientras continúan las investigaciones sobre las motivaciones del presunto agresor y el origen del arma utilizada.
Se prevé que la policía presente cargos formales contra Mintzas en los próximos días y que se amplíen las revisiones de antecedentes para comprender cómo un ciudadano con tan poca interacción previa con la ley pudo acceder a un rifle de alto calibre. Las autoridades también evaluarán posibles fallas en la regulación de armas de fuego y continuarán con medidas preventivas para evitar incidentes similares en Sídney y otras ciudades del país.
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