La decisión del Gobierno de Nayarit de pintar árboles vivos como parte de una decoración navideña oficial encendió alertas entre especialistas en arbolado urbano y conservación ambiental. Brigadas de la Comisión Forestal del Estado aplicaron pintura directamente sobre troncos y bases de árboles en el Parque Lineal de Tepic, práctica que fue difundida por la propia dependencia en redes sociales.
Las imágenes muestran a personal estatal cubriendo árboles en pie con pintura y colocando estructuras decorativas elaboradas con ramas y materiales naturales. La autoridad presentó la iniciativa como un intento de “fusionar el espíritu navideño con la conciencia ambiental”, pero el mensaje no convenció a la comunidad científica.
Especialistas consultados advierten que la intervención no solo carece de sustento técnico, sino que puede generar daños progresivos en los árboles, algunos de ellos irreversibles.
Especialistas advierten afectaciones fisiológicas
La bióloga y arborista nayarita Erika González Olvera, integrante de la Asociación Mexicana de Arboricultura, cuestionó abiertamente la medida y afirmó que no se trata de un caso aislado. Señaló que prácticas similares ya se habían documentado en otros municipios del estado.
“Las ocurrencias de las autoridades cansan. La decoración no puede anteponerse al manejo adecuado del arbolado”, advirtió.
González recordó un caso reciente ocurrido en el Pueblo Mágico de Jala, donde autoridades locales pintaron con pintura vinílica el tronco de un huanacaxtle o parota de aproximadamente 80 años, conocido por la comunidad como “El Árbol que Todo lo Oye”, un ejemplar con alto valor ambiental y simbólico.
Según la tradición local, ese árbol es punto de reunión comunitaria, con una sombra en forma de domo donde se realizan actividades sociales y de convivencia. Para la especialista, intervenirlo de esa manera representa también un daño al patrimonio cultural.
La arborista explicó que la pintura aplicada sobre un árbol vivo bloquea las lenticelas, impide el intercambio gaseoso, altera la microbiota natural de la corteza, favorece la aparición de hongos y puede provocar daños fisiológicos progresivos.
“Pintar árboles no es trabajo ni decoración: es vandalización del patrimonio natural”, subrayó.
Además, advirtió que clavar objetos o colocar adornos directamente en los troncos genera lesiones, estrés fisiológico y abre la puerta a plagas y enfermedades.
Solicitan explicaciones y medidas correctivas
González informó que la Asociación Mexicana de Arboricultura ya envió oficios formales solicitando explicaciones y acciones correctivas tanto por el caso de Jala como por lo ocurrido en el Parque Lineal de Tepic. Hasta el momento, dijo, no han recibido una respuesta oficial.
“Es lamentable que quienes deberían cuidar el arbolado sean quienes lo dañan”, expresó, al tiempo que llamó a las autoridades a capacitarse antes de implementar acciones que afectan ecosistemas urbanos.
Hasta ahora, la Comisión Forestal de Nayarit no ha explicado por qué se optó por aplicar pintura sobre árboles en pie ni si esta práctica forma parte de algún protocolo técnico aprobado. En su boletín oficial, la dependencia se limitó a invitar a la ciudadanía a visitar el Parque Lineal para apreciar el paseo navideño con sello verde.
Para especialistas, el caso vuelve a poner sobre la mesa la falta de criterios técnicos en el manejo del arbolado urbano y la necesidad de políticas públicas que prioricen la conservación por encima de la imagen.
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