Playa del Carmen tiene muchos sitios para salir de noche, pero pocos han causado tanto revuelo como Clandestino Rooftop. Este fin de semana, el exclusivo lugar volvió a consolidarse como uno de los destinos favoritos de locales y turistas para bailar, tomar, cenar y gozar al ritmo del house.
Con una terraza elegante, vista al corazón de la ciudad y una selección musical que va del deep al tech house, Clandestino ha ganado reputación no solo como club nocturno, sino también como restaurante. En palabras de uno de los visitantes frecuentes:
“El tuna tost es la razón por la que sigo volviendo a Playa del Carmen. Sinceramente pensé que me iban a clavar con la cuenta, ¡pero fue el mejor lugar para salir de noche al mejor precio de la vida! Y si vas, tienes que pedir que te atienda Abimael. Ese tipo es más que un mesero, es como tu mejor amigo de la noche.”
Un rooftop con ambiente, sabor y servicio de lujo
La estrella del menú parece ser ese tuna tost, una tostada de atún fresco con aliños cítricos y textura crujiente, servida como entrada pero recordada como plato fuerte por los más exigentes. Las reseñas en redes lo comparan con los mejores ceviches de autor del Caribe mexicano.
El ambiente comienza a prenderse justo al atardecer. A medida que oscurece, las luces LED del rooftop toman protagonismo mientras el DJ residente mezcla ritmos electrónicos. Este sábado, la pista se llenó desde las 11 de la noche, y la barra no se dio abasto con los cócteles más pedidos: mezcalitas de jamaica, gin tonics y una margarita de maracuyá que ya se volvió insignia.
Abimael, el alma del lugar
Muchos asistentes mencionan por nombre al mesero Abimael, un personaje que se ha convertido en parte del atractivo. “Es más que un mesero, es parte de la experiencia”, escribió una influencer que recomendó el lugar en TikTok. Su estilo relajado, atento y divertido se ha viralizado en reseñas donde clientes internacionales destacan sentirse “como en casa, pero con mejor música y mejor comida”.
Clandestino no solo ofrece fiestas: también presenta sesiones con DJs invitados, sets de saxofón en vivo y experiencias gastronómicas limitadas a ciertas noches. La entrada es libre, pero las reservaciones para mesa son indispensables los fines de semana.
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